Egocéntrico Paranoide

¿Quien no ha jugado alguna vez, en la cena de navidad, a beberse dieciseis copas de cava del tirón, meterse tres polvorones en la boca e intentar pronunciar palabras de mas de cuatro sílabas como "intrascendente", "metrosexualicémonos" o "anticonstitucional"? yo nunca, oiga, y además no conozco a nadie que lo haya hecho.. pero a lo mejor hay alguien que si, no se. Hay gente que se entretiene con cualquier cosa.

Sirva este prefacio como prólogo al preámbulo en el cual diré que hoy no me apetece ponerme místico ni hacer filosofía del todo a 100 como otros dias. Es lunes y tengo la cabeza espesa, así que voy a hablar de gilipolleces variadas. Como por ejemplo, de famosos de esos que te encuentras por ahí. Sólo unos pocos, porque tengo una lista muy larga (no es por vacilar, oye... aunque vacilar de esto, que penita ¿no?). Simplemente es que -por motivos que no se ni yo- me he ido encontrando gente del folklore. Primero diré los que quedan bien, los famosos que te encuentras en sitios guais y que quedas como dios contándolo... y poco a poco iremos bajando el listón.

Por ejemplo, en una fiesta funky en el Sidecar (Plaça Reial), nos topamos con Álex de la Iglesia, al que saludamos y le dijimos que nos había encantado La Comunidad. Por el Eixample me he tropezado nosecuantas veces con Quim Monzó, y siempre he deseado tener a mano uno de sus libros para que me lo firmase, y en una calle de Madrid con Javier Bardem, que nos miró un poco por encima edel hombro... también hace unos años, en la difunta disco de pijines Fibra Óptica, había no-se-qué-historia de la pasarela Gaudí y estaban allí Naomi Campbell -a quien toqué, en un arrebato de mitomanía-, otra modelo que no se quien era y -atención, porque este no se que coño pintaba allí- Imanol Arias, que me miró con cara de mucho asco porque dije "Ostias!! el Lute!! Camina o revienta!!".

Puede que haya alguno mas, pero aqui acaba mi colección de famosos estándar, esos que todo el mundo conoce... En otro apartado de la memoria guardo a los que no son famosos fuera de sus círculos, pero si que son muy importantes dentro de mi mitomanía personal. Casi todos DJs o gente de la escena electrónica. Estos al no ser tan estrictamente famosos suelen ser mas accesibles y tenemos anécdotas mas cercanas como -por ejemplo- la noche que atropellé a Ritchie Hawtin en los autos de choque del Sónar, cuando hablé de música con Frankie Knuckles durante unos veinte minutos o una noche que le tocamos el afro a Dego McFarlane (el de 4hero!!) mientras pinchaba en el Apollo.

A partir de ahí, podemos empezar a bajar el listón y empezar a contar historias de famosos de caspa... pero de caspa-caspa. Como por ejemplo, aquella noche que nos encontramos al Alcalde Rockero del Bierzo y nos lo llevamos de fiesta (verídico, y también fué en plaça reial, como no. Además el tipo se estiró y nos invitó a cubatas), el enanito ese que hace películas porno -que ya lo hemos visto tantas veces que nos resulta hasta familiar- o las azafatas del crónicas marranas, que ya sabemos incluso a que disco van los miércoles y a cual los jueves.

Bajemos un poco mas al inframundo... hace unos años solíamos cenar en un restaurante de l'Eixample en el que un conocido travesti de la zona amenizaba la cena con sus coplillas. Años después dió el salto a la telebasura y el mundo supo quien era Violeta la Burra (lo que no se es si seguiría cantando "gorrión" y "el pito", que eran dos pedazo de canciones del género bujarrón canalla). Fué por esa época cuando iba por el paralelo con un colega a las tantas de la mañana y nos cruzamos con tres cholakos con una pinta bastante mangui y siniestra, y le dije a mi colega "vamos a cambiar de acera, que esos no me gustan nada"... "¿pero que dices, nen? si son Los Chichos!!"

Mi anecdotario del famoseo toca fondo con el Junco, el rey de los casetes de gasolinera , cantaor de baladas en plan italiano pero en chungaleto de extrarradio. Al Junco lo conocí en persona hace unos diez años porque teníamos un "amigo" común... bueno, un amigo mío que le estuvo suministrando la farlopa durante una buena temporada.