jueves, septiembre 02, 2004
La belleza de lo deprimente
Hace poco me bajé un disco llamado Portishead - Pearl. El disco en cuestión me dió una alegría, porque no conocía la existencia de un tercer LP de esta banda (aparte de los directos, claro) y porque me gustan demasiado, tanto que ya hace bastante tiempo que tengo ganas de escuchar mas canciones de ellos.
Aun así, el disco tiene un par de cosas que me hacían sospechar:
- No aparece catalogado en Amazon ni en DiscoGS, y no me creo que un grupo con tanto tirón como Portishead tenga un disco "pirata" lleno de material original que haría las delicias de cualquier friki del Trip-Hop, engrosando los beneficios de los directivos de Polygram de forma espectacular.
- Es un gran disco, que duda cabe, pero no suena a Portishead. Es como una mezcla de Portishead, Massive Attack y unos cuantos arreglos de cosecha propia. Además, la cantante tiene unos cuantos ramalazos a lo Beth Gibbons, pero no es Beth Gibbons (aunque en algunos temas te hace dudar).
En resumen: que no es Portishead, pero ello no quita que sea un disco de Trip-Hop jodidamente grande. Tras investigar un poco en amazon y en Google, he averiguado que el grupo se llama Mandalay y que -según he podido leer por ahí- una panda de piratas rusos fazineriosos puso en circulación un CD con las canciones de Mandalay y una portada falsa que presentaba el disco
como si fuera un trabajo de Portishead.
Total, que despues de unas cuantas semanas sin saber muy bien si lo que escuchaba era realmente un trabajo de Portishead diferente, un disco equivocado o un fake de otro grupo que suplantaba a los de Bristol, al final se lo que estoy escuchando... y además tengo otro grupo para añadir a mis favoritos del Trip-Hop melancólico-depresivo: Mandalay. Entre esto y el disco en solitario de la Gibbons, ya tengo las necesidades góticas cubiertas para un mes por lo menos.
Todo esto era para decir que estoy escuchando Mandalay - Empathy
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